Al Alsaciano le van a criticar su política, la bisoñez de sus jugadores e incluso lo poco matemático de su sistema. Los resultados en la máxima competición continental avalan en cierto modo a los críticos de Wenger. Sin embargo, no veo justo oscurecer y minimizar la categoría del director técnico del Arsenal. En un año marcado por las lesiones claves (Cesc, Adebayor, Van Persie y Gallas) Wenger ha mantenido a su equipo entre los cuatro primeros pese a la irrupción de más petrodólares y les ha llevado a la antesala de la final de Roma. Año tras año, Wenger se ha visto obligado a plegarse sobre sí mismo, ofrecer soluciones a la austera cartera del Arsenal comparada con los grandes y renovar constantemente un equipo ya de por sí joven. El tiempo de la opulencia y de los Thierry Henry, Ashley Cole, Sol Campbell, Dennis Bergkamp, Robert Pires y Patrick Viera ya pasó. Progresivamente, aquel equipo formado por estos jugadores de talla mundial ha ido dando paso a un Arsenal imberbe. Y ahí es donde reside el mérito de Wenger. Fiel a un mismo estilo alegre, fluido y rápido el Arsenal ha sido capaz de mantener una línea constante de resultados en la Premier League y en la Champions. Realmente no se ha visto al equipo desdibujado en ningún momento y nunca, nunca ha traicionado su filosofía. Quizás es verdad que les falta algo para dar el paso final. En cualquier caso, creo que el trabajo de Wenger está fuera de dudas y de sospechas. Y no hablo solo de su labor como reclutador, sino de tu faceta como técnico. Tener una identidad durante tantos años, al margen de jugadores y de las leyes del mercado es un triunfo por encima de los resultados. |
miércoles, 6 de mayo de 2009
Una lanza en favor de Wenger
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Sé Deportivo
en
14:59
Etiquetas: 7, 9, Arsenal, Arsène Wenger, Cesc Fabregas, Champions League, Cristiano Ronaldo, Premier League
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